Introducción
Como bien dijo Sharon Feiman-Nemser, «no hay nada tan práctico como una buena teoría» (comunicación personal, 19 de mayo de 2016). Esta afirmación, realizada en un taller sobre mentoría docente en Nueva Zelanda, es especialmente relevante cuando hablamos de la teoría del aprendizaje significativo de David Ausubel (1968).
David P. Ausubel, psicólogo educativo y teórico del aprendizaje cognitivo, revolucionó la forma en que entendemos el proceso de aprendizaje con su teoría del aprendizaje significativo. A diferencia de otros enfoques que se centran en la memorización o en la repetición mecánica, Ausubel propuso que el aprendizaje verdaderamente efectivo ocurre cuando los estudiantes son capaces de conectar nueva información con lo que ya saben. Esta conexión no solo facilita la comprensión, sino que también permite que el conocimiento se retenga a largo plazo.
En este artículo, exploraremos en profundidad los principios fundamentales de la teoría de Ausubel, analizando conceptos clave como la subsunción, los organizadores avanzados, y la distinción entre aprendizaje significativo y aprendizaje memorístico. Además, discutiremos cómo estos conceptos pueden aplicarse en el aula para mejorar la enseñanza y el aprendizaje.
El Aprendizaje Significativo vs. El Aprendizaje Memorístico
Uno de los aportes más importantes de Ausubel fue su distinción entre aprendizaje significativo y aprendizaje memorístico. Según Ausubel (1968), el aprendizaje significativo ocurre cuando el nuevo material se relaciona de manera sustancial y no arbitraria con lo que el estudiante ya conoce. En otras palabras, el aprendizaje es significativo cuando el estudiante puede integrar la nueva información en su estructura cognitiva existente, estableciendo conexiones claras entre lo nuevo y lo conocido.
Por el contrario, el aprendizaje memorístico ocurre cuando la nueva información se almacena de manera aislada, sin conexión con el conocimiento previo. Este tipo de aprendizaje es superficial y tiende a olvidarse rápidamente, ya que no se integra en la estructura cognitiva del estudiante. Ausubel argumentó que, aunque el aprendizaje memorístico puede ser útil en ciertos contextos (por ejemplo, para recordar datos específicos como números de teléfono o fechas históricas), no es efectivo para la adquisición de conocimientos complejos y duraderos.

La Importancia del Conocimiento Previo
Para Ausubel, el conocimiento previo del estudiante es el punto de partida esencial para cualquier proceso de aprendizaje. Según él, «el factor más importante que influye en el aprendizaje es lo que el estudiante ya sabe» (Ausubel, 1968, p. 12). Esto significa que los docentes deben tener un profundo entendimiento de las estructuras cognitivas de sus estudiantes antes de introducir nuevos conceptos. Si el docente no tiene en cuenta lo que los estudiantes ya saben, es probable que el nuevo material se perciba como irrelevante o desconectado, lo que dificultará su asimilación.
Ausubel enfatizó que el aprendizaje significativo no es automático; es decir, no ocurre simplemente porque el docente presente información nueva. En cambio, el aprendizaje significativo requiere que los estudiantes realicen un esfuerzo cognitivo para integrar la nueva información en sus estructuras mentales existentes. Este proceso implica comparar, contrastar y relacionar el nuevo material con lo que ya se conoce.
Subsunción: El Proceso de Integración del Conocimiento
Uno de los conceptos centrales de la teoría de Ausubel es la subsunción, que se refiere al proceso mediante el cual el nuevo conocimiento se integra en la estructura cognitiva existente del estudiante. Ausubel describió dos mecanismos clave que facilitan este proceso: la diferenciación progresiva y la reconciliación integradora.
Diferenciación Progresiva
La diferenciación progresiva es el proceso mediante el cual el docente introduce el nuevo material en su nivel más abstracto y general, y luego lo va especificando gradualmente. Este enfoque permite a los estudiantes comprender primero los conceptos generales y luego profundizar en los detalles. Por ejemplo, al enseñar sobre el clima, el docente podría comenzar explicando qué es el clima en términos generales (por ejemplo, «el clima es el estado de la atmósfera en un lugar y momento determinado») y luego avanzar hacia conceptos más específicos, como los diferentes tipos de clima (tropical, desértico, polar, etc.).
Este enfoque no solo facilita la comprensión, sino que también ayuda a los estudiantes a organizar el nuevo conocimiento de manera jerárquica, lo que facilita su recuperación posterior.
Reconciliación Integradora
La reconciliación integradora, por otro lado, se refiere al proceso de comparar y contrastar el nuevo material con el conocimiento previo. Este mecanismo permite a los estudiantes identificar similitudes y diferencias entre lo que ya saben y lo que están aprendiendo, lo que refuerza la comprensión y facilita la integración del nuevo conocimiento.
Por ejemplo, si un estudiante ya conoce el concepto de «evaporación» en el ciclo del agua, el docente puede ayudarle a relacionar este concepto con el nuevo tema de la formación de nubes, destacando cómo la evaporación es un paso clave en este proceso. Al hacer estas conexiones, el estudiante no solo comprende mejor el nuevo material, sino que también refuerza su comprensión del concepto previo.
Organizadores Avanzados: Herramientas para Facilitar el Aprendizaje Significativo
Para facilitar el proceso de subsunción, Ausubel propuso el uso de organizadores avanzados. Estos son herramientas pedagógicas que se presentan antes del nuevo material y tienen como objetivo activar el conocimiento previo del estudiante, preparando su mente para recibir la nueva información.
Según Ausubel, «la función principal del organizador es cerrar la brecha entre lo que el estudiante ya sabe y lo que necesita saber antes de poder aprender con éxito la tarea en cuestión» (1968, p. 148). Los organizadores avanzados pueden tomar muchas formas, como resúmenes, diagramas, preguntas guía o analogías. Su objetivo es proporcionar un marco conceptual que ayude a los estudiantes a organizar y dar sentido al nuevo material.
Por ejemplo, antes de enseñar sobre los ecosistemas, un docente podría presentar un organizador avanzado que explique qué es un ecosistema en términos generales y cómo se relaciona con conceptos que los estudiantes ya conocen, como las cadenas alimentarias o los ciclos biogeoquímicos. Este organizador no solo activa el conocimiento previo, sino que también proporciona una estructura mental que facilita la comprensión del nuevo material.
El Papel del Docente en el Aprendizaje Significativo
Ausubel enfatizó que el papel del docente es fundamental para facilitar el aprendizaje significativo. Según él, los docentes deben ser facilitadores activos que guíen a los estudiantes en el proceso de conectar el nuevo conocimiento con lo que ya saben. Esto implica:
- Conocer el conocimiento previo de los estudiantes: Los docentes deben evaluar lo que sus estudiantes ya saben antes de introducir nuevos conceptos. Esto puede hacerse a través de preguntas, discusiones o actividades diagnósticas.
- Diseñar actividades que fomenten la subsunción: Las actividades de aprendizaje deben estar diseñadas para que los estudiantes puedan comparar, contrastar y relacionar el nuevo material con su conocimiento previo.
- Utilizar organizadores avanzados: Los docentes deben emplear organizadores avanzados para preparar a los estudiantes para el nuevo material y facilitar su integración en la estructura cognitiva.
- Fomentar la reflexión y la metacognición: Ausubel argumentó que los estudiantes aprenden mejor cuando son conscientes de su propio proceso de aprendizaje. Por lo tanto, los docentes deben fomentar la reflexión y la metacognición, ayudando a los estudiantes a pensar sobre cómo están aprendiendo y qué estrategias están utilizando.
Reflexiones Finales
Gran parte de la teoría del aprendizaje significativo de Ausubel se ha integrado en la psicología educativa moderna, aunque a menudo no se le da el crédito que merece. Ausubel debería ser reconocido por su contribución al desarrollo de los organizadores avanzados, una herramienta pedagógica que sigue siendo ampliamente utilizada en la educación actual. Él enfatizó la importancia de comenzar con lo que ahora se conoce comúnmente como la «gran imagen» y luego enseñar para llenar los detalles. Según Ausubel, «lo más importante que influye en el aprendizaje de los estudiantes es lo que ya saben» (1968, p. 12). En otras palabras, el docente debe conocer el contenido de la estructura cognitiva del estudiante para poder enseñar de manera efectiva.
Hoy en día, muchos educadores en todo el mundo intentan adaptar la instrucción al conocimiento previo de los estudiantes para que el aprendizaje sea significativo. Por ejemplo, en los Estados Unidos, la visión de la educación científica reconoce que «la comprensión conceptual basada en las experiencias previas de los estudiantes es central para la nueva visión de la educación científica» (Moulding, Bybee & Paulson, 2015, p. 4). Los docentes deben involucrar a sus estudiantes, y como resultado, en muchos países, la ciencia como forma de indagación está en el núcleo del currículo de ciencias. Por ejemplo, en Singapur, los docentes de ciencias trabajan para asegurar que sus estudiantes aprendan a través del cuestionamiento, la exploración y la evaluación (Tan, 2018).
Los docentes deben proporcionar oportunidades para que los estudiantes hagan conexiones entre el nuevo contenido introducido y lo que ya saben, de modo que puedan darle sentido. Esto se logra «animando a los estudiantes a reconocer y desafiar las suposiciones subyacentes a nuevas proposiciones, a distinguir entre hechos e hipótesis, y entre inferencias justificadas y no justificadas» (Ausubel, 2000, p. 53).
Resumen de la Teoría de Ausubel
En resumen, los principios clave de la teoría del aprendizaje significativo de Ausubel son:
- Los estudiantes aprenden mejor cuando sus docentes conocen lo que ya saben y enseñan en consecuencia. El conocimiento previo es el punto de partida para cualquier aprendizaje nuevo.
- Los estudiantes aprenden mejor lo que realmente hacen. El aprendizaje es un proceso activo que requiere que los estudiantes participen en actividades significativas, a menudo repetidas varias veces, para dar sentido al nuevo contenido.
- Los estudiantes aprenden mejor cuando tienen oportunidades para practicar actividades relevantes, útiles y significativas que desafían lo que creen saber. El aprendizaje significativo ocurre cuando los estudiantes son desafiados a cuestionar sus suposiciones y a integrar nueva información en su estructura cognitiva existente.
Referencias
- Ausubel, D. P. (1968). Educational psychology: A cognitive view. Holt, Rinehart and Winston.
- Ausubel, D. P. (2000). The acquisition and retention of knowledge: A cognitive view. Springer.
- Feiman-Nemser, S., & Floden, R. E. (1984). The cultures of teaching (Occasional Paper No. 74) [Report]. Institute for Research on Teaching, College of Education, Michigan State University. ScholarWorks@Brandeis. https://scholarworks.brandeis.edu/esploro/outputs/report/The-Cultures-of-Teaching-Occasional-Paper/9924027376901921
- Moulding, B., Bybee, R., & Paulson, N. (2015). A vision and plan for science teaching and learning. Essential Teaching and Learning Publications.
- Sexton, S. S. (2020). Meaningful learning—David P. Ausubel. In Science education in theory and practice (pp. 163–175). Springer International Publishing. https://doi.org/10.1007/978-3-030-43620-9_12
- Tan, K. C. D. (2018). Science education in Singapore: Preparing learners for the 21st century. Springer.